Mis compañeras
peruanas, quieren sorprender a su familia en el día de Reyes, así que me llaman
y me piden que por favor les haga dos tartitas para festejar la fiesta. La pena
que me pedía con Swiss Meringue de fresa, y en ese momento sólo lo tenía hecho
de plátano.
Me pongo manos
a la obra, o al horno, que habría que decir. Comienzo horneando los bizcochos
pero el gran problema que se me plantea es la decoración, ya que pretendo que
sea algo de acuerdo con las personas que me las han encargado. Mi cabeza gira y
da vueltas y no sé qué tipo de decoración poner y qué me encuentro capacitado
para hacer, que esa es otra cosa. En fin, que lo primero que pienso es que cómo
es la bandera de Perú, ya que la verdad, no tenía ni idea. La busqué en Internet
y sorpresa, tiene los colores del equipo del Sevilla F.C. blanca y roja. Bueno
pues pensado y hecho, comienzo por ponerle una base blanca, que cada vez me
gusta más, pues es como si fuera un lienzo en blanco listo para pintar. Le
pongo unos círculos en rojo y como no, encima, saltando un circulo una flor
amarilla, que por algo también están en España y así consigo los colores
nacionales de España. En fin, entre círculos y flores de margarita creo que
quedó bastante simpática.
Vale, ya tengo
una planificada pero ¿y la otra? Pues como tenía unos moldes para cortar
mariposas, corté algunas de distintos colores y pensé que por qué no doblarlas
para darles un aire de movimiento, y a su vez darle un ligero toque con los
colorantes en gel.
También me habían intentado enseñar a hacer rosas, y aunque
al principio se ven bastante difíciles de hacer, al final se cumple el refrán
de “La práctica hace al maestro”. Bueno, pues al final el resultado no fue el
que yo quise, pero si quedó mejor de lo que yo esperaba.
A pesar de todo, les encantaron las dos
tartas. Gracias a Aída y a su hermana por confiar en mí para festejar el día de
Reyes, y !!!Viva el Perú¡¡¡¡
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