Uno de mis
amigos “Juanes”, que es de un pueblo de Badajoz, está interesado en saber como
son y a qué saben las tartas de fondant, así que un día charlando, llegamos a
un acuerdo, ya que a mi el queso extremeño “torta del casar” me vuelve loco,
por lo que concluimos que le cambiaba una tarta por un queso.
Por supuesto,
el queso siendo Juan de Ribera del Fresno, no iba a ser una torta del casar,
sino una torta de Barros, queso que aquella localidad está intentando llevar a
la misma popularidad que el otro tiene.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Vuestros comentarios alimentan mi blog.